Nuevas normas europeas en camino: productos libres de deforestación
2 dic 2021
“Sólo se permitirán en el mercado de la UE los productos legales y libres de deforestación, especialmente soja, carne de vacuno, aceite de palma, madera, cacao y café”, declaran las máximas autoridades de la Unión Europea en un comunicado de noviembre 2021. La urgencia ambiental y climática impulsan la necesidad de nueva legislación. Ahora hay que implementarla, y sobre todo respetarla.
Entre 1990 y 2020 se han perdido en todo el mundo 420 millones de hectáreas de bosques, un 10% de los que quedan en el mundo y una superficie mayor que la de la Unión Europea (FAO,2020). La deforestación y la degradación de los bosques son importantes causas impulsoras del calentamiento global y de la pérdida de biodiversidad, los dos retos ambientales más importantes de nuestro tiempo.
El nuevo Reglamento para minimizar la deforestación y la degradación forestal provocadas por la UE pretende promover el consumo de productos «libres de deforestación».
El principal motor de la deforestación y la degradación forestal es la expansión de las tierras agrícolas. Por eso, y por el apoyo gran apoyo de la ciudadanía europea a la acción para detener la deforestación y la degradación forestal que respondió masivamente a una consulta al respecto, la UE pretende dejar de permitir productos relacionados con la deforestación como soja, carne, madera, cacao, café y aceite de palma. Asume así parcialmente la UE su responsabilidad de este problema y quiere responder a la firme exigencia de los ciudadanos europeos de que lidere el camino para resolverlo.
Tememos sin embargo, que no se estén poniendo todos los medios necesarios para hacerlo, al tirar balones fuera al confiar excesivamente en los procesos locales de control en los países productores. Es el caso claro de la soja en Brasil, país que en este momento se encuentra en una crisis ambiental y de derechos humanos y que en realidad está alentando la deforestación de la Amazonía a gran escala, incumpliendo el Código Florestal (ley forestal de Brasil) precisamente debido a la expansión de la soja, entre otras causas. Un estudio publicado en Science en julio 2020 reveló que entre el 18% y el 22 % de las exportaciones anuales brasileñas a la Unión Europea son resultado de la deforestación ilegal de la Amazonía y el cerrado.
Esta afirmación y la implementación de políticas europeas requiere vigilancia ciudadana y también el compromiso de la ciudadanía con respecto al propio consumo, pues ni la propuesta, ni siquiera la existencia de normas implica su inmediato y consecuente cumplimiento. La defensa de los bosques y selvas no puede quedarse sólo en el papel, como acostumbra.